Partido con un comienzo trabado y cerrado entre dos rivales que se estudiaron y bloquearon por lo que las defensas se impusieron en la etapa inicial. En el complemento, un poco más hablado que jugado llegaron los goles, en su mayoría fueron más por errores ajenos que por méritos propios y de aquí el que se confundió menos se llevó los tres puntos.

Tibia y Peroné estuvo como el campeón japonés de buceo, Toko Fondo y a pesar de que en la primer mitad la pelearon, en el segundo tiempo costó mucho salir de atrás; para colmo, hubo algo de bulling futbolero entre compañeros.

El Kal no quiere apretar el pomo pero quieren seguir así o que termine ya, se quieren sacar la carga de tanto años y de una vez por todas lograr ese tan ansiado... falta montones y deberán tratar de tener los pies sobre la tierra para afrontar lo que viene.