Partido aplastante tipo el enero porteño sin luz que lo ganó el más fresco ante un adversario que se transformó en la mosca de verano, molesta pero no pica y así el desarrollo fue simple entre un equipo que generó mucho más que el otro.

El Kal estuvo incomodó desde el inicio, intentaron jugar por abajo pero no lograron salidas limpias por lo que estuvieron faltos de profundidad, lo mejorcito, el 10 Kufa, con alguna pisadita y un caño en el camino.

Pensa en Verde es una máquina de funciones simples: en defensa, se refugian todos por detrás de la línea del balón casi metidos en el área, y en ataque, salen disparados como pedo de café con leche para ejecutar un contragolpe tras otro a máxima velocidad y con buena eficacia.