El comienzo de partido mostró claramente la idea que iba a permanecer en el juego durante los 40 minutos. La Plaza con control de balón y jugando a dos toques le hizo la vida imposible a Lado B, los azules apretaban y no dejaban que los romanos definan con tranquilidad, y de hecho apretaba a los defensores y ganó un par de bochas mano a mano con el portero.
La merma física del team azulado y un par de contras faltales allanó el camino a los lungos romanos que a partir de ahí y sin sufrir sobresaltos como nos tiene acostumbrados se llevó un triunfo de los que antes les costaban los campeonatos.
Lado B se llevó alguna preguntas, pero sobre todo lo que confirmó fueron sus fortalezas.