Qué lindo es el fútbol cuando la paridad hace del juego una novela exquisita donde todos quieren invitar al balón a pasear por el campo contrario, acariciarlo hacia un túnel de suela, ¡y que vuelva! para terminar debajo de la red alardeando a los gritos por una conquista que puede contribuir con la victoria tras una excursión memorable sin tener que dar explicaciones. Maravilloso es el fútbol cuando en esta dinámica de lo impensado nos regala el mejor partido del campeonato a pesar de enfrentarse el último con el primero en un choque de polos.
Cara de Mierda brindó su mejor cara y si no fuera o fuese por San Paoli, 4 pelotas en los palos, cuando todo era parejo y equilibrado, la historia pudo ser otra. De todas maneras sus jugadores debieron retirarse más que conformes por lo hecho en el verde césped y esta lavada de cara le vino bien al team.
“321 Palo” “San Paoli” o “Los Dioses de Callejeros” son otros de los títulos que sonaron en punta para el titular del triunfo de uno de los punteros que está vez mostró que no tiene solo fútbol para ser el candidato y que también gana cuando no le salen del todo bien las cosas en una victoria trabajosa.