Partido con un primer tiempo inclinado como barranca de estacionamiento de 11 pisos en el que pusieron la pelota arriba y la dejaron caer simplemente para que por decantación o inercia la redonda siempre vaya en una misma dirección. El 5 a 1 inicial fue mucho para un complemento más equilibrado pero definido.

Ateos desconocido tanto en ataque como en defensa y quizá solo en el medio pudo bancarla, estuvieron desconectados básicamente porque su goleador no estuvo en su tarde y su líbero se vio desbordado, por lo que si dos de los tres de la columna vertebral no funcionaron como siempre contra el mayor contendiente hasta el momento, fue todo muy difícil.

Plaza Doce una bestia, el 9 Saravia entendió todo, picante e inquieto, recibía de espaldas, se daba vuelta y sacudía con lindos goles; de pronto, tras interpretar una linda bomba colocada se escucha "goles parecidos a la premier league"; menos mal que no hay doping porque más de uno se cree que en Inglaterra se juega tan lindo como en el verde césped en la casa de los profesionales del fútbol amateur.