Una goleada que, a primera vista, parece hablar de un desequilibrio total. Sin embargo, el fútbol es más que un simple marcador. Este partido fue una exhibición de efectividad por parte de Sudacas, que supo capitalizar cada una de sus oportunidades. Para Toco, el resultado es doloroso, pero la historia de este encuentro no es la de un equipo que se rindió, sino la de uno que, a pesar de sus intentos, se encontró con una versión letal del rival.

Este partido nos enseña que a veces, por más que se tenga la voluntad y el deseo de ganar, la efectividad del rival puede ser una fuerza imparable. Como decía el gran Johan Cruyff, "el fútbol es un juego de errores". Toco cometió más, y Sudacas supo aprovecharlos con maestría. La goleada no minimiza el esfuerzo de Toco, sino que enaltece el gran partido que jugó Sudacas.