A veces los partidos no se ganan solo con talento, sino con orden, esfuerzo y saber sufrir. Toco y No Voy entendió esa premisa a la perfección y se llevó una victoria ajustada pero merecida por 2 a 1 ante un Papota FC que, pese a las ausencias, dejó una imagen digna y un arquero que fue figura absoluta.

El conjunto de Santi Fernández sigue encontrando su forma ideal. No es casualidad que los resultados empiecen a acompañar: el equipo parece haber aprendido a competir. Con Thiago Cabrera manejando los hilos y la aparición estelar del Vincha Gamarra —un delantero movedizo, picante, de esos que huelen el gol antes de que ocurra—, el equipo generó peligro constante. “Vincha” fue el jugador más desequilibrante del partido: encaró, giró, remató, incomodó siempre. Solo la actuación monumental de Fabricio Marassa, el arquero de Papota FC, impidió que el marcador fuera más amplio.

Lo de Marassa fue digno de archivo. Atajó todo. Pelotas bajas, tiros cruzados, remates desde media distancia. En una jornada así, cualquier entrenador lo querría tener. Como dijo una vez el mítico Dino Zoff: “El arquero no es un héroe, es una necesidad”, y el domigo Papota necesitó de su uno en cada jugada.

Papota, pese a las bajas de nombres clave como los hermanos Diaz, Juan Llorens, se las ingenió para competir. Incluso uno de los arqueros debió jugar de nueve, símbolo claro de adaptación y coraje. Les faltó volumen de ataque —o “Golumen”, como bien se dice en la jerga interna—, pero no actitud. Supieron plantarse, presionar y mantenerse en partido hasta el final.

En Toco y No Voy se vio algo importante: una idea. El equipo parece haber encontrado su identidad. Defiende mejor, es equilibrado, juega simple. Gamarra y Cabrera empiezan a asociarse y eso puede ser el inicio de una dupla que dé réditos a futuro. El propio DT Fernández lo sabe: el equipo está “poniendo el inodoro en el baño y las hornallas en la cocina”, ordenando su estructura futbolística desde la base hacia adelante.

Ganó por la mínima, sí, pero con justicia. Porque en el fútbol, como dijo alguna vez Menotti, “no siempre gana el que más patea al arco, sino el que mejor entiende lo que pasa dentro de él”.

Así fue como Toco y No Voy, el equipo de Santi Fernández, venció 2 a 1 a Papota FC, el conjunto de Augusto “Mariscal” Juárez, en un partido intenso, parejo y jugado con espíritu de liga verdadera.