Fue un partido entre dos mundos que, sin embargo, se cruzan en un mismo sueño: aprender, competir y crecer. El puntero invicto Dream Team, sólido, ordenado y con esa jerarquía que se gana con tiempo y fútbol, se impuso 7-1 ante Asado Group, un equipo que da sus primeros pasos, pero que demuestra que está en el camino correcto.

Desde el arranque, Dream Team impuso condiciones. Movió el balón con criterio, sin apuro, entendiendo que el control también es parte del dominio. Como decía Guardiola, “la posesión no es tener la pelota, es dominar al rival”, y eso fue lo que hicieron los de celeste: dominar.
Por su parte, Asado Group, con más corazón que rodaje, aprovechó cada transición para probar, ajustar y absorber experiencia frente a uno de los candidatos al título. Cada pase, cada cruce, fue aprendizaje puro.

El Pluma Puzone, arquero proveniente de Manchester Tiki, fue el héroe silencioso de Asado Group. Tapó pelotas imposibles, sostuvo el resultado cuando todo ardía y fue una de las grandes figuras del partido a pesar del marcador.
Pero Dream Team tiene un plantel que, cuando acelera, no perdona. Mauri Bedouret, imparable, se despachó con una tripleta que lo deja entre los máximos artilleros de la categoría.
Franquito Posadas, siempre lúcido, asistió con precisión quirúrgica y hasta protagonizó una jugada de tiro libre junto a su hermano, al mejor estilo Hockey, que terminó en gol y aplauso general.