Partido vibrante y entretenido pero cortado donde cruzar mitad de cancha fue más difícil que meterse en la cama sin que la patrona se avive luego de volver de una noche de juerga; imposible, inspección y cacheo para intentar cruzar a campo contrario. Fue apretado de juego algo confuso con dos arqueros que se lucieron y al final lo ganó quién metió la pelotita.

Ratoes no deberá recordar este mal trago y quedarse con el camino, con gran valor por el balón y el juego asociado, sacrificio y por sobre todas las cosas, el buen conocimiento de sus piezas.

Caño la Liga despreocupado y Santa en el arco escaló al 4to puesto y ahora las expectativas son otras, ya firmaron contrato con el arquero invicto?