Partido de gran calidad técnica en el cual 8 de los 10 jugadores en cancha no son habituales jugadores del torneo de los sábados; así todo, cada uno demostró sus dotes en el gris mosaico, a pura suela de la escuela futsalera. La diferencia vino dada con el marcador y entonces a medida que uno sacaba ventajas el otro buscaba fallas en el árbitro para lo cual el resultado reflejó sentencia mucho antes del silbatazo final que la decretó.

El Pilar con un mix de jugadores del futsal del Club mostraron enseguida que se nota a lo que juegan, que entienden y tienen buenas intensiones, lástima que estuvieron quejosos y entraron a jugar un partido aparte con el hombre de negro que distrajo y corto el vuelo.

ADO de la mano del Rolo Lavallo obtiene un triunfazo con los alternativos mientras los titulares o habituales estaban en una despedida de soltero. El capitán presentó una plantilla de alto nivel para suplir las bajas y desde ahí se focaliza el triunfo.