Encuentro que prometía paridad entre planteles que se conocen mucho y que querían cambiar la imagen de la semana anterior.
El cotejo se definido en la etapa inicial con un plantel carioca concentrado y certero mientras de otro lado lo que abundó fue el desconcierto.
Raggamuffin siente mucho el descanso futbolístico no logra orden ni juego colectivo. Deberá insistir para ganar confianza y volver a ser el plantel que empareja cualquier encuentro.
Jogo bonito con la sangre en el ojo no volvió a cometer el error de llegar al partido con un equipo corto incorporó jugadores y los históricos hicieron lo suyo para que la sinfonía de la zamba suene y se baile durante cuarenta minutos de fútbol amateur.