Partido que tenía la característica de ser trabado, muy disputado y con dos equipos que se sabe de antemano que pueden ganar, perder o empatar pero siempre van a correr y "dejar todo" en la cancha. Y así fue nomás, ambos estaban con el cuchillo entre los dientes y la disputa por el balón era importante, finalizando así la primera parte en un vibrante 2 a 2. Pero en la segunda parte, una expulsión en el equipo de la "selva" definió sin dudas el partido, ya que el equipo de los "pensadores" no dejaron pasar la ventaja de tener un jugador y automáticamente comenzaron a dominar el partido a su merced. Queda la duda que hubiese pasado con los diez jugadores en cancha. Lo cierto es que PSV decoró un contundente 10 a 3 a su favor.